Como ya viene siendo habitual esta nueva edición de Supervivientes decidió separar a los concursantes en dos islas diferentes. Y como no podía ser de otra forma la separación fue por sexos, de forma que mujeres y hombres se separaron para conquistar su nuevo destino.
Me surge entonces la obligada pregunta ¿cuál es la intención del programa a la hora de tomar esta decisión? Y aquí es donde llega el título que he dado al artículo, La guerra de sexos.
A través de esta separación hombres por un lado y mujeres por otro harán una especie de piña y visualizarán a los enemigos en el grupo rival. Algo muy atractivo de cara a la audiencia y que a buen seguro aumenta el share, principal motor de cualquier programa.
Esta situación suele resultar una desventaja para el equipo de las chicas, las cuales se suelen caracterizar por tener más problemas en el trato personal. Rencillas, riñas, y todo tipo de discusiones que terminan mermando su deseos de seguir en la isla.
En fin, aún es pronto para realizar más previsiones sobre lo que acontecerá por Honduras, de forma que lo mejor será esperar algunos días. Pero, ¿cuál es tu opinión? ¿A quién beneficia la guerra de sexos?
jueves, 26 de marzo de 2009
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